EL PERRO COBRADOR DE TRABAJO
Conozco muchos tipos de comportamientos dentro de los perros cobradores, pero cuando un perro es bueno en términos generales, son buenos para absolutamente todo, comportamiento en el hogar, equilibrio máximo con personas, con perros y tienen ese deseo a cualquier hora de complacerte.
He notado en 27 años de convivir con estas razas caninas, que cuando el perro se siente ágil, veloz, que puede dominar cualquier terreno y clima tanto en tierra como en agua, pueden dar su máximo y terminan desarrollando mucho mejor todo su crecimiento, tanto físico como mental.
Cuando un perro cobrador tiene algunas de estas cualidades, pero carece de otras como la agilidad, ellos mismos bajo su propia experiencia de campo inician poniendo sus límites y esto llega a rebasar incluso su instinto mismo por auto cuidarse en términos generales, dejando sus actividades de lado y buscando otras que su estado se lo permita. En este punto es cuando inicia la crítica positiva o negativa sobre el ejemplar, ya que, si se busca para actividades y deportes de campo, necesitaremos todas sus virtudes y no hay más que hablar, así cumplirán con su función sin críticas necesarias. Si tenemos un perro que cuenta con cualidades, pero carece de otras como lo mencionamos, iniciara ese faltante que no cumple la expectativa del dueño para la verdadera razón que lo adquirió y dejará el trabajo, el juego o cualquier actividad botada a media jornada. Siendo redundante esto no quiere decir que el perro sea malo, si no que él se limita por sus incapacidades que le impiden seguir, aunque su instinto le dicte vamos por más y no cumplirá para lo que fue creado.
La agilidad y ese deseo desbordante se confunde muchas veces con perros locos, acelerados y necios y es un gran error ya que eso le pasa a cualquier perro de cualquier raza que no tenga las atenciones y cuidados necesarios para su bienestar. El hecho de que sean rápidos, agiles y de mucha potencia nos esta diciendo que es un perro sano, que vivirá al máximo toda su vida y la va realmente a disfrutar ya que puede con lo que se le ponga enfrente y esto se traduce en felicidad para el perro y para sus dueños.
La contra parte es cuando los perros vienen de mala genética, de cruzas mal pensadas y estudiadas. Aquí si viene el perro ágil y loco que se convierte en una de las carencias que debemos descartar al igual que la agresividad entre otras tantas.
Para lograr tener un perro de estas cualidades, necesitamos acercarnos con los profesionales que dedican una vida entera en cuidar estas características para seguir teniendo perros completos y funcionales en todo momento. Ahí es el lugar indicado para adquirir un cachorro o perro con todas las garantías para el trabajo y que toda su generación esté en los niveles óptimos y máximos de trabajo.
En el perro de trabajo se les ve de muchas formas y la belleza está en saberlos apreciar, valorar y verlos cumplir lo que marca su función zootécnica, porque esto es resultado absoluto de su calidad de vida al máximo.
Hay muchas maneras de mantener en buena forma a nuestros perros de trabajo ya que tenemos la gran ventaja que al ser caninos en muy pocos días pueden estar a su máximo de condición física por que así es de rápida su recuperación como especie.
Los perros cobradores los considero velocistas, son perros de esprint absoluto tanto en la ida como en el regreso de un cobro y así lo deben de hacer. La forma correcta de entrenar y lograr su condición física rápida y de la mejor manera es ejercitarlos con esprints y no recorridos largos a trote sino esprints de 40 a 50 metros donde exploten en salida y exploten al regreso deseando llegar para poder ir por más. Estos son parámetros e indicativos para poder valorar correctamente un perro cobrador de trabajo y saber si cumple realmente como perro completo dentro de las características de su raza.
Se da por hecho que un perro que tiene todas estas cualidades cuenta con una estructura muy buena en su mecánica de movimiento y logra sacar su máximo potencial en respiración a la hora de desarrollar cobros rápidos y de mucha distancia o jornadas largas de trabajo. Todo se junta y este tipo de perros generalmente cuentan con todo esto.
También el perro de trabajo cuenta con una memoria perfecta de marcar una o varias piezas al caer, puede pasar mucho tiempo y siguen sabiendo que ahí están al mandarlos llegarán con facilidad. También tienen un marcaje muy firme y saben calcular perfectamente a que distancia cayeron las piezas. El buen perro de trabajo siempre realizara líneas rectas en sus cobros sobrepasando lo que encuentre en su camino y ahí es donde se valora también todo lo bueno de un ejemplar, ya que ahí vemos ese total potencial que debe tener un buen perro cobrador de trabajo.
La adiestrabilidad en estos perros es inmediata a muy corta edad y así debe ser con todos los perros cobradores. Si notamos que nuestro perro con buena técnica no desarrolla rápido aprendizaje a corta edad, tenemos focos rojos encendidos y ya son indicativos claros para saber si será un perro completo o no.
Las pruebas de trabajo son indispensables para poder evaluar todas estas características de las razas cobradoras y el nivel máximo es el estándar de su verdadera función zootécnica. Solo así las futuras generaciones cumplirán y ayudarán a su propietario como lo debe hacer un buen perro cobrador de trabajo.
En los niveles avanzados, se les exige completa obediencia, marcajes simultáneos, dobles, triples para valorar su memoria, sus líneas rectas son analizadas y juzgadas para saber valorar al perro que cualquier obstáculo que este en su camino lo sacará sin dificultad, la manera de portar las piezas y entregarlas. En estos niveles se piden cobros ciegos donde nunca ven caer las piezas y esto es para analizar y ver su adiestrabilidad y capacidad de trabajar en coordinación absoluta con su manejador para ayudarles a encontrar las piezas mucho más rápido y ver su disposición de cumplir con estas órdenes en armonía.
En ocasiones caen piezas en agua cerca de las orillas al frente de una laguna circular y muchos perros se van por tierra y rodean todo este recorrido dejando muchas veces la sensación de que el perro fue muy listo y se ahorro cruzar la laguna para llegar más rápido a la pieza. En realidad esta manera de hacerlo es una carencia y por eso en las pruebas se pide la línea recta para valorar si el perro no presenta alguna experiencia natural que le impida hacerlo de esta manera correcta.
El perro cobrador de trabajo tiene que ser fuerte y saber resistir las inclemencias del clima, para ello tienen que ser completos y aquí tampoco hay mucho que hablar.
En general el perro cobrador de trabajo es el perro que se disfruta en el hogar, se disfruta en el paseo, se disfruta en el trabajo y sobre todo sabemos que se conserva para lo que fueron creadas estas razas caninas.
Por concluir si buscamos un perro cobrador de trabajo completo, nuestras metas siempre tienen que llegar al perro de nivel avanzado sabiendo que desde el inicio tenemos un perro con el potencial de llegar fácilmente al mejor nivel con un buen adiestramiento profesional.
Por José Ramón Foyo